Hay veces que a la hora de contratar un servicio de hosting optamos en su lugar por buscar alguna alternativa, la cual obviamente va a ser montar dicho servicio por cuenta propia, es decir, hacer uso de un servidor local. ¿Pero qué es exactamente un servidor local? ¿Y cómo puedo tener uno? Pues hoy te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre este tema.
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¿Qué es un servidor local?
Primero que nada antes de comenzar a hablar de servidores necesitamos definir por supuesto qué es un servidor exactamente. A grandes rasgos, un servidor es básicamente una computadora, parecido en muchos aspectos a la computadora que tienes en tu casa u oficina, aunque claro, tiene sus diferencias y está destinada a ser utilizada con otros fines que las típicas computadoras de casa o del trabajo.
Aparte de algunas pocas diferencias en el hardware, ¿qué otra cosa hace que una computadora y un servidor sean diferentes? Pues como ya lo hemos dicho, otra diferencia clave es el propósito, ya que la idea detrás de un servidor es justamente que «sirva» datos, es decir, que despache algún tipo de contenido o información o lo que sea que se necesite.
Un servidor lo que es hace es, básicamente, despachar los datos que le son solicitados y que se encuentran almacenados en su sistema. Esto pueden ser diferentes cosas, todo dependerá el propósito del servidor: pueden ser sitios web enteros, pueden ser algunos datos puntuales de una base de datos, puede ser contenido estático como imágenes o videos, entre otras muchas cosas.
Con esto en claro, ¿a qué nos referimos entonces cuando hablamos de servidores locales? Pues generalmente los servidores son brindados por empresas de hosting, y en dichos casos estos servidores se encuentra ubicados físicamente dentro de un data center. El data center es el lugar donde se montan y conectan a Internet los servidores que una empresa alquila a sus clientes, aunque en algunos casos dichos servidores pueden ser vendidos en vez de arrendados.
Ese sería el caso de un servidor normal contratado a una empresa de hosting, ¿pero qué diferencia tiene con un servidor local? Pues un servidor local, como lo dice su nombre, es un servidor que está ubicado físicamente en la misma ubicación que nosotros, esto puede ser por ejemplo en nuestra en casa, nuestra oficina, un estudio, etc.
Ventajas y desventajas de tener un servidor local
Disponer de un servidor local tiene algunas cuantas ventajas, aunque también tiene sus desventajas. Así que vamos a analizar ambos aspectos.
Ventajas de tener un servidor local
- Ahorro de dinero a largo plazo: la compra de un servidor nunca es barata, y en muchas ocasiones arrendarlos tampoco, pero puedes estar seguro que arrendar un servidor te saldrá muchísimo más barato que comprarlo. Esto quiere decir que sí compramos un servidor tendremos una fuerte inversión inicial, sin embargo al cabo de un año o dos, dependiendo del costo del servidor, habremos ya amortiguado ese gasto.
- Rápida conectividad: no es lo mismo tener un servidor a unos pocos metros de ti en una red local que tenerlo a miles de kilómetros al otro lado del mundo. Sí, hoy en día las líneas internacionales son muy buenas y la diferencia en la distancia se nota en pocos casos, pero sigue estando: si tienes el server localmente siempre obtendrás un mejor tiempo de respuesta, y si se trata de un servidor de juegos online su ubicación es extremadamente importante.
- Mayor seguridad: la seguridad es también un aspecto clave para muchas empresas, y hay quienes simplemente no confían en guardar información importante en un servidor al cual no pueden tener acceso físicamente. Para este tipo de casos un servidor local también se vuelve algo ideal, ya que se puede controlar quién tiene acceso al servidor a nivel físico.
Desventajas de tener un servidor local
Por supuesto el disponer de un server local tiene ciertas desventajas, no todo va a ser color de rosas.
- Mayor gasto de energía: gastarás más energía eléctrica, así como también posiblemente un mayor gasto en el servicio de Internet. Vamos a necesitar sí o sí una IP dedicada para nuestro server, y recuerda que las conexiones dedicadas son más costos que las que usan IP dinámica.
- Falta de partes para reemplazar hardware defectuoso: cuando tenemos un servidor en un data center y ocurre una rotura o falla de hardware es nuestro proveedor quien se encarga de reemplazar el hardware averiado o defectuoso, sin embargo si esto nos ocurre con un servidor local entonces seremos nosotros mismos quienes tendremos que comprar la nueva pieza. Quizá incluso tengamos que contratar la ayuda de un técnico para poder cambiarla, lo cual obviamente involucra un gasto adicional, mientras nuestro servidor está caído.
- Falta de técnicos calificados: los servicios de administración de servidores también entran en juego aquí, ya que será necesario que alguien se encargue de administrar el servidor en caso de que no sepamos hacerlo. Obviamente podemos contratar un servicio externo, pero estos suelen ser caros, aunque muy buenos en la mayoría de los casos. ¿Y en qué caso el servicio de administración suele ser bueno y no demasiado caro? Pues cuando el server es arrendado con un proveedor de hosting: en esas situaciones se suelen ofrecer administraciones de servidores a buenos precios. Obviamente si tienes un servidor local no vas a poder acceder a un mejor precio que si lo tienes contratado con un proveedor de hosting.
Cómo montar un servidor local
Primero que nada es muy importante definir algunas cosas antes de montar un servidor local, es necesario asesorarse en varios aspectos, como es la administración del servidor, el tipo de Internet que tenemos, si disponemos de IP fija o no, si nuestro Internet es lo suficientemente rápido, el consumo energético del servidor, entre otros.
Una vez estamos 100% seguros de que tenemos lo necesario para poder montar un server, entonces es hora de buscar un servidor. Hay muchos servidores muy buenos de distintas marcas de servidores como HP o Dell, similares a los que usamos aquí en Infranetworking. Son servidores caros, pero muy buenos sin dudas. Si no puedes permitirte uno, entonces puedes ir por alguna opción más barata, por ejemplo un servidor Supermicro.
Con el hardware definido, es hora de elegir el sistema operativo. Para la mayoría de los casos Linux será lo más adecuado, pero en algunas situaciones quizá quieras optar por Windows Server, más que nada si buscas alojar aplicaciones ASP, de lo contrario elige Linux.
Las distribuciones CentOS, Ubuntu, Debian y RHEL suele ser alguna de las más usadas en servidores, aunque todo dependerá de tus necesidades: asegúrate de elegir el sistema operativo correcto para instalarlo en tu servidor y también verifica si dicho SO tiene algún costo, es decir, si debes pagar una licencia, como ocurre por ejemplo en el caso de Windows Server.
Ahora llega el momento de la verdad: comprar el servidor. Como con todo producto que compres vía Internet, asegúrate de que lo compras desde un vendedor oficial o revendedor autorizado, y evacúa todas las dudas que tengas antes de la compra.
Cuando recibas el servidor y lo tengas en tu casa u oficina, es hora de comenzar con el montado, para esto necesitarás a alguien que te ayude con el tema de redes si no sabes realizar este tipo de procedimientos. El siguiente paso una vez el server esté conectado a la red y enchufado será encenderlo.
Tras encenderlo puede que nos cargue un sistema operativo (si ya viene uno instalado) o puede que tengamos que instalarlo. Los SO suelen ser instalados mediante el booteo de la ISO del sistema operativo en un pendrive o memoria USB, es decir, conectas el pendrive, reinicias el server y comenzará el proceso de instalación. Si el proceso no inicia puede que necesites ajustar el BIOS de tu servidor para hacer que se cargue primero la memoria USB, porque si se carga primero el disco no podrás instalar el sistema operativo deseado.
Suponiendo que se cargue correctamente la instalación del SO, solo debes seguir los pasos en pantalla, generalmente las instalaciones son sencillas, quizá lo que te dé más problemas sean los particionados si nunca has hecho uno, recuerda por las dudas tener un experto disponible o bien pedirle a alguien que sepa del tema que lo haga por ti, esto te puede ahorrar muchos dolores de cabeza.
Luego de instalado el sistema operativo ya podrás comenzar a utilizar tu nuevo servidor. Debes asegurarte que la conexión a Internet funcione correctamente y que el servidor haga uso de una IP fija, esto nuevamente puedes revisarlo por tu cuenta o dejar que alguien más se ocupe.
Algunos sistemas pueden venir con un servidor web y otro software importante ya instalado, pero la mayoría simplemente no lo incluyen. Así que en este caso te vamos a mostrar cómo realizar la instalación de un sistema LAMP en un entorno CentOS/RHEL.
LAMP es un acrónimo que refiere a cuatro cosas: Linux, Apache, MySQL y PHP. Este es uno de los setups más comunes y utilizados a nivel mundial en servidores, y suele ser muy fácil de instalar. Para la instalación de software en Linux el método más usado es la consola o Terminal, así que es bueno estar familiarizados con esta herramienta si vamos a instalar software en Linux.
Para el caso de servidores con CentOS o RHEL, el proceso es el siguiente, comenzando con la instalación de Apache al ejecutar este comando:
yum install httpd
Recuerda que para esto necesitas ser usuario root o tener un usuario con permisos sudo que esté autorizado a instalar software en el server. Con este sencillo comando vamos a estar instalando Apache y algunas dependencias asociadas al mismo que el sistema determina automáticamente.
El siguiente paso es PHP. Este es un lenguaje de programación extremadamente usado, de hecho es el más usado en programación web, y si vas a tener un sitio web basado en PHP necesitas instalarlo, el procedimiento es muy sencillo:
yum install php php-mysql
El detalle con PHP es que tiene muchísimas extensiones, y puede que necesites algunas puntuales para que tu web funcione, así que asegúrate de investigar eso de antemano así sabes cuáles extensiones del servidor PHP vas a necesitar. Por supuesto si lo deseas puedes instalarlas más adelante, no hay problema en hacerlo en cualquier momento.
Con Apache y PHP ya instalados, es hora de proceder con el servicio de bases de datos: MySQL, o alternativamente MariaDB, que básicamente es un derivado del servidor de base de datos MySQL aunque funciona de forma extremadamente similar. Por defecto los sistemas operativos incluyen uno u otro en sus repos por default, la instalación nuevamente es muy simple:
yum install mysql mysql-server
Y eso es todo: en esta situación ya tendrás un entorno LAMP instalado. Por supuesto instalar no equivale a configurar: tendrás que configurar estos servicios según tus necesidades y de acuerdo a los sitios web que vayas a tener en el servidor. También dependerá de lo que quieras alojar si necesitarás instalar algún software adicional, como podría ser un servidor de correo por ejemplo.
En estas situaciones es ideal que dejes el tema en manos de un administrador de sistemas si no tienes muchos conocimientos sobre cómo administrar un servidor. Tener tu propio servidor local es genial, pero lleva muchas responsabilidades y se requiere de ciertos conocimientos para poder hacerlo correctamente. Si no lo haces bien puede que al final termines gastando incluso más dinero al mes que si lo tuvieras arrendado con un proveedor, así que ojo con eso.
Esto es apenas el comienzo: tener el servidor marchando y con una suite de software básica instalada son apenas los primeros pasos para poder decir que tenemos un servidor local funcional, todavía falta configurar servicios, instalar cualquier software adicional, trabajar en la seguridad, optimizaciones, montar los sitios web y un largo etcétera. Y claro está, también puedes instalar otros servidores como Nginx, no debes limitarte a usar Apache como hemos hecho aquí en este ejemplo.
Conclusión
En esta oportunidad hemos aprendido una cuantas cosas sobre los servidores locales: primero que nada definimos de qué es un servidor y qué diferencia a un servidor local de uno que se encuentre en un data center. Hemos aprendido también cuáles son las desventajas y ventajas que un servidor local tiene.
También vimos cómo es el proceso básico de montar nuestro propio servidor local, que incluye elegir el servidor correcto, elegir un sistema operativo, comprar el servidor, colocarlo en nuestra oficina, instalar el sistema operativo y realizar algunas instalaciones básicas, aunque recordemos que apenas estamos arañando la superficie en lo que a servidores locales refiere.