Uno de los muchos términos con los cuales nos podemos cruzar en el mundo del SEO es lo que se conoce como la tasa de rebote. Entre infinidad de números y estadísticas, la tasa de rebote es uno de los valores a los que más debemos prestar atención si queremos que un sitio web tenga un buen posicionamiento en buscadores, por eso en esta oportunidad te vamos a contar todo lo que necesitas saber al respecto.
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La tasa de rebote explicada
Si queremos definir la tasa de rebote, podemos definirla como el porcentaje de visitantes que abandonan un sitio web en menos de 10 segundos y sin haber realizado ninguna acción significativa, como por ejemplo hacer click en un enlace, realizar una compra, llenar un formulario, etc.
Hay tres razones por las cuales la tasa de rebote es una de las métricas más importantes para el SEO.
- Una persona que «rebota» en nuestro sitio es una persona que no ha realizado ninguna conversión para nosotros. Dicho de otra forma, si evitamos que las personas reboten al ingresar a nuestra web, estamos incrementado las probabilidades de tener una conversión.
- Si bien el algoritmo de motores de búsqueda como Google es privado, a esta altura es bien sabido que la tasa de rebote es uno de los factores que más influyen en el posicionamiento en buscadores, es decir a que menor tasa de rebote es más probable que logremos posicionarnos en mejores lugares.
- Una tasa de rebote alta nos sirve como indicador de que algo en nuestro sitio web no está bien, puede ser la interfaz, el contenido u otra cosa, sea lo que sea debemos encontrar el origen del problema y solucionarlo.
Esta estadística notoriamente dependiendo del sitio web, es decir que para determinados sitios web podemos tener una tasa de rebote considerada normal, pero para otro sitio esa misma tasa podría ser considerada alta.
Por ejemplo en páginas del tipo landing la tasa de rebote media suele oscilar entre el 60% y el 90%, según un estudio de Customedialabs. Dicho estudio además indica que para sitios de tiendas online la media de este valor va del 20% al 45%. Una diferencia importante sin dudas, dejando en claro que para una landing es normal tener una tasa de rebote del 60%, pero para una tienda ese valor sería considerado alto.
Si quieres saber si tu sitio web tiene una tasa de rebote baja, media o alta, basta con compararlo con otros sitios web dentro del mismo nicho. Pero hay más: el origen del tráfico también impacta en la tasa de rebote. Un estudio de ConversionXL indica que el tráfico proveniente de emails y referidos tiene la menor tasa de rebote, del 35,2% al 37,5%. A su vez, el tráfico que se origina en redes sociales y anuncios suele tener una tasa de rebote mayor, entre el 54% y 56,5% aproximadamente.
Impacto de la tasa de rebote en el SEO
La tasa de rebote es un factor muy importante que no debemos pasar por alto, ya que habla mucho sobre el SEO de nuestro sitio web. Una tasa de rebote alta puede aumentar las posibilidades de que nuestro sitio web no posicione tan bien como deseamos en los resultados de búsqueda, y esto se debe a una combinación de factores que impactan en el SEO:
- Experiencia de usuario: un porcentaje alto de tasa de rebote puede estar indicando que la experiencia de los usuarios en nuestra web no es buena y no están logrando encontrar lo que buscan. Esto puede ser por diversas razones, ya sea falta de contenido, interfaz poco amigable, etc.
- Relevancia: la tasa de rebote alta indica que el contenido de nuestra web no es lo suficientemente relevante para nuestros visitantes, y no estamos logrando las interacciones necesarias para disminuir el porcentaje. Si los visitantes continuamente rebotan en tu sitio, los buscadores pueden interpretarlo como que tu web no tiene contenido relevante, y eso es malo para el SEO.
- Tiempo de permanencia: otra métrica importante que no se debe pasar por alto. Si bien la tasa de rebote mide cuando un usuario sale rápidamente de un sitio al que ingresó, el tiempo de permanencia no se debe subestimar, porque incluso un tiempo de permanencia bajo sin una salida inmediata se convierte en una mala señal.
- Autoridad de dominio: los sitios con un puntaje alto de autoridad de dominio suelen brindar a sus usuarios contenido relevante y que estos buscan, ayudando a reducir la tasa de rebote. Contar con un porcentja que sea bajo y una alta puntuación de autoridad de dominio suelen ser indicadores de que estamos en el camino correcto en nuestras estrategias SEO.
¿Es lo mismo tasa de rebote y tasa de salida?
Estos dos términos con frecuencia se confunden y mezclan ya que son bastante similares, sin embargo no dejan de ser distintos porque tienen una diferencia muy notoria entre ambos:
- La tasa de rebote, como ya sabemos, es el porcentaje de usuarios que llega a nuestra web y la abandona rápidamente.
- Y la tasa de salida es el porcentaje de usuarios que abandona una página específica, incluso si no fue la primera página de nuestra web a la cual accedieron.
Para hacerlo más claro, usemos dos ejemplos.
Para la tasa de rebote, tomemos un usuario que ingresa a nuestra web y a los pocos segundos la cierra sin haber interactuado, eso es un rebote.
En el caso de la tasa de salida, supongamos que ese usuario del ejemplo anterior no se fue de nuestra web, sino que hizo click en un enlace, fue dirigido a una segunda página de nuestro sitio, y allí lo abandonó, ya sea cerrando la pestaña o el navegador.
En este segundo caso, no hubo rebote en la primera página porque interactuó con ella para llegar a la segunda, y en la segunda tampoco hubo rebote porque no fue la primera página a la que llegó, sin embargo al abandonar la segunda página rápidamente, contribuyó a aumentar el porcentaje de salida de dicha página.
Como podemos ver ambas tasas son parecidas e incluso están relacionadas en cierta forma, aunque no dejan de ser conceptos distintos.
Cómo reducir la tasa de rebote
Y llegamos al plato principal. Si has leído todo hasta aquí es probable que ya tengas una buena idea de lo que te vas a encontrar a continuación, pero incluso si ya lo tienes en claro te lo vamos a contar de todas formas. ¿Cómo se puede reducir la tasa de rebote?
Mejorar la calidad del contenido
A menudo decimos que el contenido es rey, y no es ninguna broma, la calidad de tu contenido marca una diferencia importante entre quienes se quedan en un sitio web y quienes lo abandonan, es decir que tener contenido de alta calidad y que sea atractivo para el usuario contribuirá a que los usuarios reboten menos al ingresar a nuestra web.
Usar un diseño más bonito y llamativo
Como ya sabemos la información entra primero por los ojos, y esto aplica a sitios web. Lo primero que vemos al entrar en un sitio no es el contenido en sí, sino el diseño, la interfaz. Cuanto más llamativa, bonita y prolija sea la interfaz, más probable es que nos quedemos en el sitio.
Si ingresamos a un sitio web que tiene el mejor contenido del mundo pero el apartado visual hace que queramos sacarnos los ojos, entonces es probable que rápidamente lo abandonemos, y eso por supuesto significa que la tasa de rebote subirá.
Implementar una interfaz amigable
La interfaz de usuario no debe ser subestimada: incluso si nuestro sitio es muy lindo y llamativo, si los usuarios no pueden navegar por él fácilmente y no logran encontrar lo que buscan rápidamente, es probable que debemos hacerle algunos retoques a la interfaz, de lo contrario ya sabemos lo que ocurrirá.
Reducir la velocidad de carga
Pero incluso antes del diseño, la interfaz y la calidad lo primero que vamos a notar al ingresar a un sitio web es la velocidad de carga. Si un sitio demora demasiado en cargar lo más probable es que lo cerremos en menos de 10 segundos, simplemente porque no tenemos ganas de esperar tanto tiempo, menos aún considerando la cantidad de alternativas que hay ahí fuera.
Utilizando herramientas como PageSpeed Insights podemos ver los puntos fuertes y débiles de la optimización de nuestro sitio. Usar un hosting de alta velocidad y trabajar en estos puntos para reducir la velocidad de carga es extremadamente importante, ya que los sitios que cargan más rápido tienen una menor tasa de rebote.
Conclusión
La tasa de rebote es un factor que habla mucho sobre un sitio web, ya que si es demasiado alto nos puede indicar que nuestro contenido no es de calidad, o quizá nuestra interfaz no es muy amigable, el sitio no es llamativo o directamente demora una eternidad en cargar.
Todos los factores que influyen en la tasa de rebote también influyen directamente en el SEO, así que mantener una tasa de rebote baja es una tarea primordial si queremos tener un buen posicionamiento en los resultados de búsqueda.